La Asociación de Ingenieros Agrónomos de Junín (AIAJ), junto con la Estación Experimental Junín del INTA y la UNNOBA, realiza ensayos anuales a campo de soja, maíz y trigo, proporcionando información esencial para la selección de cultivares que optimizan el rendimiento y la sanidad en la región.
En esta coyuntura de costos ajustados, tomar la decisión acertada es fundamental para un productor agropecuario o un ingeniero agrónomo. Elegir un cultivo que se comporte de manera diferencial en cuanto a plagas y enfermedades, así como lograr que estos cultivos alcancen un plus en el rendimiento, puede marcar la diferencia en los márgenes brutos.
Los integrantes de la Asociación de Ingenieros Agrónomos de Junín (AIAJ) lo saben bien. Cada año, la AIAJ realiza ensayos a campo de soja, maíz y trigo con el objetivo de generar información útil para la toma de decisiones de manejo en Junín y alrededores. El objetivo es evaluar comparativamente los principales cultivares disponibles en el mercado en términos de rendimiento, calidad de grano, sanidad y otras características agronómicas que ayuden a definir su potencialidad y adaptabilidad a la zona.
“La elección de la variedad o híbrido a sembrar es un pilar fundamental en la formación de rendimientos”, explica el ingeniero agrónomo Juan Ignacio Fariña, miembro de la AIAJ y uno de los responsables de los ensayos que se realizan en tres sitios distintos del partido de Junín. “Contar con una red de ensayos locales es esencial para conocer, estudiar y comparar comportamientos y potencialidades de los cultivares presentados al mercado por las distintas empresas semilleras”, dice.
El trabajo para la elaboración de los informes se realiza entre la AIAJ, la Estación Experimental INTA Junín y la UNNOBA.
Entre las empresas se destaca la participación de variedades de BASF, ACA, Nidera, AG Seeds, NK Seeds,Blen Agro, SPS, Pionner y Syngenta. “Todas las empresas están invitadas a participar”, dice Fariña.
En cuanto a los suelos los informes detallan que en el partido de Junín predominan los suelos Hapludoles Típicos en posiciones normales del terreno y Hapludoles énticos en las lomas. Son suelos profundos y oscuros con aptitud agrícola, bien a algo excesivamente drenados, relativamente jóvenes con escaso desarrollo. Una de las Series predominantes es la serie Junín, de textura franco limosa, Capacidad de Uso III e índice de productividad general de 62. Sus principales limitaciones están asociadas a la susceptibilidad a la erosión eólica y escasa retención de humedad en períodos de sequías prolongadas.
“La información generada a través de estos ensayos nos aporta una herramienta más para conocer cuáles variedades están mejor adaptadas a las condiciones locales específicas. En cuanto a la metodología, se cuenta con tres sitios de ensayos dentro del partido de Junín para lograr consistencia en los resultados. En uno de los sitios se realizan microparcelas con diseño en bloques aleatorizados y repeticiones y los otros dos con más manejo del productor con parcelas más grandes y testigos apareados, es decir que cada material es comparado con un testigo a la par evitando que sucedan irregularidades en el ensayo”, explica Fariña.
Los resultados se procesan y se realiza en resultado estadístico para presentarse después en el informe.
“Los ensayos están abiertos para que quien quiera, pueda recorrerlos. Las visitas junto a colegas y representantes de las empresas semilleras que participan generan un intercambio que enriquece”, explica.
Por estos se están sembrando los lotes de trigo para obtener los resultados. “Los semilleros trabajan para ofrecer la mejor genética al mercado, el abanico de alternativas disponibles es grande. Conocer la diversidad de opciones, sus comportamientos diferenciales en un ambiente y el manejo específico del material es nuestro rol fundamental como agrónomos”, sintetiza Juan Ignacio Fariña.
El compromiso de la AIAJ, INTA y UNNOBA con la investigación y la divulgación de datos sigue siendo un pilar fundamental para el desarrollo agrícola.
Fuente: Diego Abdo para expoagro.com.ar