En una asamblea celebrada en la ciudad de Sunchales, Santa Fe, la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (ATILRA) resolvió dejar sin efecto su postura de confrontación y acatar las decisiones empresariales “orientadas a la recuperación de la producción y el sostenimiento de los puestos de trabajo” en la cooperartiva láctea SanCor.
El conflicto, que se prolongó durante tres años, alcanzó su punto crítico en los últimos ocho meses, cuando ATILRA adoptó medidas directas que pusieron a la empresa al borde del cierre.
Sin embargo, en la asamblea celebrada este viernes, la postura del gremio liderado por Héctor “Etín” Ponce, de 67 años, experimentó un cambio drástico, producto de “una falta de respaldo interno y un agotamiento del margen para continuar con la confrontación”.