Por primera vez desde 2018, las ventas de yerba mate en Argentina cayeron 30% en marzo en supermercados, generando preocupación en la industria yerbatera. En el final del verano, los despachos a salida de molino de yerba mate cayeron a 18.800.000 kilos, frente a los 26.500.000 del mismo mes del año anterior, según datos del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM).
En ese sentido, el bajo rendimiento en la comercialización llevó a algunas empresas, especialmente las principales del sector que compiten por su participación en el mercado, a reducir los precios entre un 10 y un 20%. A pesar de que en diciembre, enero y febrero las ventas se mantuvieron estables, la caída abrupta de ventas llevó a algunas yerbateras a estimular la demanda.
A su vez, para algunos empresarios, la política de desregulación de Javier Milei está empezando a tener efecto. El mercado pasó de la especulación a la reducción de precios, con una mayor atención en los costos para mejorar la competitividad. Las ventas, que se mantuvieron antes de marzo debido al stockeo previo a las elecciones, ahora se ajustan a una demanda más realista, explicaron desde el sector.
Finalmente, el desplome de los precios en el mercado yerbatero presenta interrogantes para los pequeños productores, quienes enfrentan problemas con los precios de la hoja verde. A pesar de solicitar un valor de $505 por kilo, solo se está pagando $370 desde fines de febrero, mientras que los costos de la nafta y otros servicios continúan aumentando, obligando a algunos a negociar con altos costos financieros.